Puede pasar desapercibido e incluso confundirse entre la intensa actividad del polígono de Rivas (Madrid), pero una vez que se entra… ¡y se prueba!, Six & Co ya no se olvida.

Este restaurante de cocina urbana en el que #comerconlasmanosmola, abre solo de jueves a domingo y da servicio tanto desde su gamberro local, como de take away, o delivery, a través de Deliveroo y Glovo. El ‘puntazo’ es que en su horario no hay problema de aparcamiento.

Six & Co nace con espíritu food truck y eso ha llevado a David y Nuria por todas las ferias y eventos gastronómicos destacables de nuestro país; y desde hace 2 años y medio es, además, un restaurante ‘al uso’ y digno de visitar.

Un ‘garaje’ donde descansa su negocio sobre ruedas y en el que se come igual de bien -pero sentado-, con ambiente distendido, buena música de fondo y la compañía que elijamos. Grandes mesas y bancos hacen posible quedadas de grupos con espacio suficiente incluso para estar en el interior; aunque mientras el tiempo aguante, también se puede disfrutar de su oferta en una terraza ideal de ambiente chill.

Entorno industrial -las estanterías de la barra están hechas de andamios y las patas de mesas y bancos con tuberías de fontanería-, un ‘buen rollo moderno’ que atrapa y como no podía ser menos, una carta acorde, divertida y para todos (incluidos celíacos y veganos) en la que es realmente difícil elegir…

El dilema empieza en los entrantes, desde los Totopos con guacamole casero o las Alitas BBQ; y para quienes vayan con hambre, el inamovible Superbowl, unas patatas gajo con ‘bowloñesa’, cheddar, bacon, guacamole y crema fresca que tiene legión de fans en la zona. ‘Entre panes’ hacen unos deliciosos “bocadillos con status” como el Viva México cabrones o el Curry Thai, con paletilla de cerdo marinado, totopos, rúcula, zanahoria y salsa curry.

La sección de perritos calientes tiene desde el más tradicional con Frankfurt, kétchup y mostaza hasta el Americano, con salsa bbq, aros, bacon, pepinillos y yuca súper crujiente; o el Guaca-Guaca, que lleva guacamole, cebolla morada, pico de gallo y totopos. ¡Un festín! Y hablando de festines, llegamos a las hamburguesas, de vaca y cocinadas a baja temperatura. Las hay con queso -Cheddar Creek-, con mucho queso -Qué Será… esta lleva hasta nueces- y también para valientes, como la On fire, que además de los 200 g de carne lleva tomate, jalapeños, rúcula, aros de cebolla, y salsa on fire picantooona -sí, con 3 oes-.

¿Queda hueco para el postre? Más vale, porque están los must para acabar una comida como se merece: Cheescacke, Brownie, Tarta de manzana y otra de chocolate y almendra sin gluten… porque sí, los celíacos, además de un dulce, tienen como el 75% de la carta adaptable.

Y para hacer hueco a tanta comida, ¿qué bebemos? Se puede acompañar de vinos por copas o una refrescante cerveza. ¿Tu botellín de siempre o te animas con una artesana de grifo de La Virgen? y terminar con un buen copazo, o esperar la burger con un gin tonic, ¡a la inglesa!